Espasa Narrativa, 2.011
Premios: ninguno
Precio: 19,90€
Adquisición: regalo
"Deja los meses, condesa, / por años debes contar. / Si a los tres años no he vuelto, /viuda te puedes llamar"
La autora
Ana Ramírez Cañil nació en Madrid y es periodista especializada en la información económica y política. Entre 1984 y 1985 vivió en Nueva York. Ha sido directora de 'Informe Semanal' y delegada de El Periódico de Catalunya en Madrid. 'Si a los tres años no he vuelto' (2.011) es su segunda novela tras la publicación de su ópera prima, 'La mujer del maquis' en 2.008. Ambas novelas se sitúan en la España de posguerra.
Sinópsis
Madrid está siendo devastada por la guerra, pero la joven Jimena Bartolomé no cabe en sí de felicidad: se acaba de casar con el amor de su vida, Luis Masa, y viven juntos en un pisito cercano a la puerta del Sol. Muy pronto esta alegría se verá truncada por la forzada huida de Luis, conocido miembro del partido comunista, al país vecino. Las desgracias nunca vienen solas. Poco después de terminar la guerra y descubrir que está embarazada es llevada a la cárcel de mujeres de Ventas sin saber quién la ha delatado ni por qué. La directora de la prisión, María Topete, la tendrá vigilada de cerca, muy de cerca. Esta mujer, que gobierna la institución con mano de hierro y es temida por todas las reclusas le intentará arrebatar lo poco que le queda en la vida.
Mi crítica
Mencionar que se nota el gran trabajo de documentación que hay detrás de esta novela resulta algo estúpido, pues es una obviedad. También que Ana R. Cañil es primero periodista y luego escritora, puesto que el lenguaje que utiliza es sencillo y muy fluido, mucho más propio del oficio primero que del segundo.
Otra obviedad: las novelas que presentan como telón de fondo la guerra civil española son demasiadas. Es una época muy atractiva para ambientar tramas de todo tipo, ya que da mucho juego. Multitud de escritores, tanto españoles como de otras nacionalidades, aprovechan nuestra contienda para explotarla literariamente a pesar de la gran cantidad de publicaciones que la mencionan, ya sea de pasada o a fondo. El resultado: novelas buenas, novelas malas y novelas que pasan sin pena ni gloria. En esta categoría se encuentran la mayoría.
Sin embargo, hay algunas buenas y algunas muy buenas. Y hay otras, como en el caso de 'Si a los tres años no he vuelto', que aprovechan historias que aún no se han contado, o que de las que se ha hablado poco. Sí, esta novela se sitúa durante los años 1.936 y 1.939, pero no es lo mismo de siempre.
Lo cierto es que este libro me ha recordado a 'La voz dormida' de la genial Dulce Chacón. Ambas coinciden en desarrollar los acontecimientos en un mismo lugar (la cárcel de mujeres de Ventas), una misma época (la guerra civil) y un mismo bando sufridor (el republicano).
Las semejanzas son importantes, pero acaban aquí. 'La voz dormida' es una novela más coral, el protagonismo está repartido. En la obra de Ana R. Cañil, Jimena lleva siempre la voz cantante. El estilo narrativo es muy diferente, y los argumentos, con sus finales, también lo son.
Esto es interesante: es la primera vez que topo con una novela ambientada en la guerra civil española en la que el punto de vista no es el de un solo bando. La autora permanece muy neutral, juzgando las atrocidades que se cometieron en un lado y en el otro siempre por boca de sus protagonistas. La crueldad estuvo presente continuamente, nos recuerda Ana R. Cañil, durante la guerra y después de la guerra. En zona republicana y en zona nacional.
Volviendo a los personajes, he de felicitar a la autora por crear un personaje como María Topete. Cuadriculada, cruel, guiada siempre por unos principios que en realidad se sustentan en terreno resbaladizo. El fin -servir a Dios y a la Patria- siempre justifica los medios. Hacía tiempo que no sentía ese asco visceral que logra provocar en mí cierto tipo de antagonistas. Ana R. Cañil logra que el lector se involucre emocionalmente en la historia, que desee saber cómo terminará este enfrentamiento entre las dos mujeres.
Sin embargo, las páginas van quedando atrás por decenas y luz al final del túnel de Jimena Bartolomé aún es tenue. La novela se ralentiza en las páginas centrales, pero no por ello el interés disminuye.
De pronto, la solución a todos los problemas de nuestra protagonista aparece tan clara como el agua, como si siempre hubiera estado allí. Esto me parece un tanto oportunista, propio de novelistas principiantes, ya que no se menciona hasta que realmente interesa. A partir de ese momento todo avanza demasiado rápido. La autora se ventila casi de golpe todos los conflictos que ha ido abriendo a lo largo de la novela. Al final he tenido la sensación de que Ana R. Cañil se aburría y por eso corrió, o bien se acercaba la fecha en que debía terminar su libro y apretó el paso.
He echado de menos un enfrentamiento final entre María Topete y Jimena Bartolomé que hubiera podido ser épico. Algunos cabos se han dejado sueltos y algunos acontecimientos que suceden al final no guardan una lógica en una época en que se perseguía a todo el que no comulgara con las ideas del franquismo.
Conclusión
'Si a los tres años no he vuelto' me ha gustado mucho. No podía parar de leer. Da una perspectiva de la guerra civil española poco común y bastante amplia. Toca un tema que apenas ha tenido difusión pero que es tan trágico como otros: el robo de niños en las cárceles de posguerra. Ana R. Cañil ha hecho un magnifico trabajo de documentación, encontrando en María Topete a la perfecta antagonista. Se nota una fuerte involucración emocional por su parte y el resultado es una novela que si bien no tiene un final perfecto, es capaz de involucrar emocionalmente al lector. La recomiendo sin lugar a dudas.
Valoración: 7,5/10
¿Recomendada?: Sí.