Alfaguara, 2.008
Premios: Premio Alfaguara de novela 2.008
Precio: 21,50€ (11,99€ en edición de bolsillo)
Adquisición: biblioteca
"- Sí, era liliputiense. Le decían «la muñeca viviente» y «el más pequeño átomo de humanidad». También «la bomba cubana», pero ese sobrenombre ella lo odiaba. La conocí hace un carajal de años, cuando ya estaba retirada. Siempre tuve la idea de escribir un libro sobre ella. Me parece una injusticia que, a pesar de haber sido tan famosa, nadie en Cuba la conozca. Pero lo fui posponiendo y se me hizo tarde".
El autor
Antonio Orlando Rodríguez nació en Ciego de Avila, Cuba, en 1.956. Escritor, editor y periodista, es licenciado en Periodismo en la Universidad de La Habana. Ha residido en Costa Rica, Colombia y, actualmente, en Estados Unidos. Es autor de la novela para adultos 'Aprendices de brujo' (Alfaguara, 2.002), de libros de cuentos y de obras de teatro. Su bibliografía incluye también investigaciones literarias y lo largo de su carrera ha publicado numerosas obras para niños y jóvenes.
En 2.008 ganó el Premio Alfaguara de novela con 'Chiquita', una biografía novelada de un destacado personaje de la sociedad cubana de finales del siglo XIX muy poco común.
Sinopsis
Espiridiona Cenda, una joven cubana de sólo veintiséis pulgadas de estatura, llega a la Nueva York de fines del siglo XIX con el deseo de triunfar como bailarina y cantante. Chiquita fue una mujer seductora e independiente que llegó a convertirse en una de las celebridades mejor pagadas de los teatros de vaudeville y las ferias de su tiempo. Protagonista de amores tempestuosos, dueña de un talismán mágico y testigo de intrigas diplomáticas, la liliputiense Chiquita vuelve a la vida en estas páginas, con todo su genio, su crueldad y su encanto, convertida en un personaje literario inolvidable.
Mi crítica
Tomé prestado este libro de la biblioteca cuando todavía no había leído la suficiente cantidad de biografías noveladas como para saber que debía tener especial cuidado con ellas. Soy una lectora poco común, y debo ser especialmente selectiva con este tipo de lecturas pues sé que es difícil atinar conmigo en este género. Sin embargo, en este caso el desatino no tuvo que ver con las características inherentes a las biografías noveladas presentes en esta obra, sino a otros elementos que iré desglosando a continuación.
Debo reconocer que me llamó poderosamente la atención su argumento. Por ello decidí llevármela a casa. La novela de Antonio Orlando Rodríguez está protagonizada por un personaje poco común, al igual que lo fue su vida. Parecía que sus páginas esconderían un relato interesante: la historia real de una liliputiense cubana nacida a finales del siglo XIX que emigra a Estados Unidos para perseguir sus sueños. Allí intenta ganarse la vida como artista e incluso llega a ser afamada y respetada, ganándose el apodo de 'Muñeca Viviente'.
El libro cuenta sus desventuras, sus amoríos y, en definitiva, su vida entera. Todo ello con un contexto histórico que contribuye a crear el cóctel perfecto para una historia jugosa: la guerra de la independencia de la isla contra España.
Este podría haber sido un magnífico telón de fondo para la novela, pero por desgracia, el contexto histórico en ocasiones tenía más protagonismo que la propia Chiquita, eclipsándo la historia principal y alejando al lector de ella. Para mi, esto fue un error.
Este podría haber sido un magnífico telón de fondo para la novela, pero por desgracia, el contexto histórico en ocasiones tenía más protagonismo que la propia Chiquita, eclipsándo la historia principal y alejando al lector de ella. Para mi, esto fue un error.
El comienzo es bueno: me gustó mucho la manera en que Antonio Orlando Rodríguez introduce al lector en la historia. El narrador en tercera persona (el biógrafo que se encarga de escribir la vida de la liliputiense) relata al lector los pormenores de su historia realizando saltos temporales, y entreteniéndose en las anécdotas más divertidas e interesantes. Resulta, en esos momentos, una obra fácil de leer, rápida y amena. Entretiene, que no es poco.
En 'Chiquita' podemos encontrar alguna pincelada de realismo mágico, pero muy discreta. Además, el autor parece querer encubrirlas y las atribuye en todo momento a la imaginación de la liliputiense.
Esto es una opinión personal, pero para mi gusto este movimiento estropea el encanto que el realismo mágico aporta a una novela. Es un elemento que, siempre que esté bien logrado, enriquece la novela, otorgándole un extra especial. A pesar de que 'Chiquita' sea una biografía novelada y se quiera ceñir a los hechos lo máximo posible, si se incluye la presencia del realismo mágico, sobran las explicaciones.
Esto es una opinión personal, pero para mi gusto este movimiento estropea el encanto que el realismo mágico aporta a una novela. Es un elemento que, siempre que esté bien logrado, enriquece la novela, otorgándole un extra especial. A pesar de que 'Chiquita' sea una biografía novelada y se quiera ceñir a los hechos lo máximo posible, si se incluye la presencia del realismo mágico, sobran las explicaciones.
El uso del realismo mágico es un recurso que el autor no debe tratar de pulir o ensalzar. Si se tiene ese don, perfecto. Si no, mejor será que se saboree como lector y no como escritor. Por supuesto, esta es una opinión muy personal; en el caso de 'Chiquita', Antonio Orlando Rodríguez no lo hace mal, pero quizá abusa de este recurso y lo moldea de una manera extraña. Sí, al comienzo son sólo unas pinceladas que después trata de desacreditar, pero a medida que avanza el libro se hace muy cuesta arriba seguirle el juego al autor. Antonio Orlando Rodríguez utiliza el realismo mágico y después intenta explicarlo, ciñéndose lo máximo posible a los hechos verdaderos, argumentando justificaciones al hecho sobrenatural o fantasioso que se acaba de producir.
Esto no queda bien, considero que el autor no hace más que cargarse la magia. Esa lucha de poder que el autor provoca entre realidad y ficción, en mi opinión, sólo consigue confundir al lector. Para colmo, a partir de cierto punto el ritmo decae estrepitosamente, y no se vuelve a recuperar. El autor se va mucho por las ramas, metiéndose de lleno en asuntos que poco o nada tienen que ver con Chiquita y sí con personajes secundarios que, ciertamente, pasan sin pena ni gloria tras sus veinte páginas de protagonismo absoluto.
Es una pena, pues en el momento en que la acción comienza a decaer el lector está de lleno metido en la historia, y el autor, en lugar de seguir alimentando las ganas de leer, le saca de la historia.
La historia que pretende contar las aventuras de 'Chiquita' no engancha para nada, algo que da mucha rabia porque la trama parte de una base muy buena, el comienzo está muy bien, y se trata de una historia genial y original que además está basada en hechos reales.
El autor tenía medio camino hecho, pero se perdió en él. Pienso que uno de los errores que cometió fue querer prestar más atención de la debida a los personajes secundarios, acción que retrasa los acontecimientos y la lectura. Otro, como señalé anteriormente, el querer explicar el por qué de todo cuando en muchas ocasiones no hacía falta.
El autor tenía medio camino hecho, pero se perdió en él. Pienso que uno de los errores que cometió fue querer prestar más atención de la debida a los personajes secundarios, acción que retrasa los acontecimientos y la lectura. Otro, como señalé anteriormente, el querer explicar el por qué de todo cuando en muchas ocasiones no hacía falta.
Conclusión
Resultado: 'Chiquita' es una novela que en principio promete, pero que finalmente queda despojada de toda su magia, de toda su pasión, de toda su gracia... y se convierte en una lectura árida e insulsa. Por desgracia, 'Chiquita' se ha convertido para mi en otro ejemplo más de que no sólo basta con una buena historia. Espiridiona Cenda, Chiquita, no merecía esta novela. No merecía que su historia se convirtiera en algo convencional, porque no lo fue en absoluto.
No califico esta novela como mediocre por su lenguaje (correcto en todo momento), ni porque la historia en sí sea aburrida. No. Esta novela no merece ser recomendada porque el autor se pierde entre la realidad y la ficción, entre su protagonista y otras figuras literarias, entre el contexto histórico y la trama principal. Para mi, un desastre.
Valoración: 6/10
¿Recomendada?: No.
Creo que me pasaría como a ti: el realismo mágico me encanta, pero en su justa -y acertada- medida. Descarto la novela porque me has convencido con tus peros.
ResponderEliminarUn besito y feliz domingo.
No conocía al autor ni al libro, pero por lo que cuentas lo voy a dejar pasar.
ResponderEliminarFeliz domingo.
No lo conocia,pero de momento lo dejo pasar,besotes
ResponderEliminarEs una pena lo que comentas. Cuando lo vi y leí la contraportada, pensé que me apetecía muchísimo leerlo porque, además, me encantan las biografías noveladas. Pero si dices que pierde su magia con las páginas y que al final resulta una lectura insípida, no lo leeré.
ResponderEliminarBesos
La biografías noveladas tendrían que mejorar la imagen de los biografiados. Es una pena que el autor estropee esta imagen por no saber escribir. Tendré en cuenta tu reseña por si se cruza en mi camino este libro poder esquivarlo.
ResponderEliminarUn beso.
No la conocía,pero he visto que no te ha convencido, y como tengo muchísimos pendientes lo dejaré pasar.
ResponderEliminarBesos!
pues vaya, no conocía el libro pero tiene muchos elementos que me llaman la atención, aunque por otra parte lo que señalas negativo me hace dudar,creo que me animaría a darle una oportunidad
ResponderEliminarbesos
Es una verdadera lástima que no hayan sabido sacarle el jugo a esta historia tan prometedora.
ResponderEliminarGracias por la reseña.
Besos.
En principio no me llamaba ya demasiado, pero lo que comentas del realismo mágico mal llevado me ha terminado de convencer para dejarlo pasar.
ResponderEliminarUn beso!!
Vaya manera de desaprovechar una historia en ese caso!! de partida también me resultaba interesante pero todos los peros y tu conclusión final me lo sacan del panorama completamente. Un beso y a disfrutar con otras cuantas.
ResponderEliminarNo me llamaba, y después de tu reseña, vaya, ni me lo planteo. Un besote.
ResponderEliminarNo me atrae demasiado, y el de este año... tampoco. No sé, me gustan muchos libros de alfaguara pero sus premios se me suelen resistir
ResponderEliminarBesos
Pues siento mucho la decepción, pero es verdad que a veces los autores se van por las ramas teniendo recursos suficientes como para llevar una historia a buen puerto.
ResponderEliminarUn beso.
Es una pena que al final no salga. Me gusta lo que has dicho del realismo mágico que es una especie de don.
ResponderEliminarNo me sonaba de nada y claro la dejaré pasar. El realismo mágico no me gusta mucho pero que se intente racionlizar menos todavía.
ResponderEliminarBesos,
Es increíble el daño que puede hacer una reseña. Chiquita es una novela deliciosa, que ha cautivado a miles de lectores de todo el mundo hispano y, como si fuera poco, ganó uno de los premios más codiciados por los grandes novelistas: el Alfaguara. ¡Por algo será! En lugar de guiarse por la opinión de una persona, juzguen por ustedes mismos. La mezcla fantasía y realidad que presenta esta novela es muy ingeniosa y divertidísima. Además, no hay que ponerle el fácil cartelito de "realismo mágico" a las novelas que juegan con la fantasía del absurdo y de lo grotesco.
ResponderEliminarEres tan libre como yo de abrir un blog y expresar tu opinión, tan contraria a la mía.
EliminarSaludos!
Me encantan los Anónimos xD
ResponderEliminarBueno, por mi parte, aún no recomendándola, la verdad es que me llama la atención... creo que podría gustarme =)
La apunto!
Besotes
Creo que no deberíamos seleccionar o descartar un libro sólo con base en una reseña o en la opinión de una persona. Lo que a uno le choca, a otro le puede fascinar. Hay que escuchar opiniones, pero tener un juicio propio.
ResponderEliminarSaludos!
La novela es tan diferente, original, atrevida y picosa como lo fue Chiquita.
ResponderEliminarMe siento rara, pero a mí si me gusto. Creo que esta escrita de una forma original y única que la hace interesante. Si se desvía un poco pero siempre tiene un fín que aporta a la historia central.
Poner en duda los sucesos mágicos me parece interesante pues te sientes identficado y libre de creerlo o no.
Antonio Orlando realizó una excelente investigación y sin embargo respeto lo que Chiquita quería que estuviera en el libro.
Me gustó mucho conocer a dos Chiquitas...la de la biografía y la que conoció quién narra..eso aporta mucho, ya que es una parte de la historia que dificilmente conocemos en otras biografías.
Si estas buscando una biografía académica, no recomiendo este libro. Orlando hace de una biografía, algo fuera de lo común, cómo su protagonista. Yo si la recomiendo.